Los chinos de ultramar son personas de nacimiento o de ascendencia china que viven fuera de los territorios administrados por los gobiernos de la República Popular China (RPCh), Hong Kong, Macao y la República de China-Taiwán (Republic Of China). El concepto Chino de Ultramar se refiere, principalmente, a los descendientes de chinos han establecidos en el extranjero, con independencia de su mayor o menor asimilación a las culturas nativas, como el caso de los mestizos chino-malayos de Malasia y Singapur conocidos como Peranakan, siempre que se reconozcan a si mismos como chinos.
Según estadísticas más al uso, aunque no excesivamente fiables, hay más de 40 millones de chinos de ultramar que en su mayoría viven en el sudeste de Asia, donde constituyen la mayoría de la población de Singapur y las poblaciones minoritarias significativas en Indonesia, Malasia, Tailandia, Filipinas y Vietnam.
La situación de los chinos de ultramar en los países de acogida siempre ha sido problemática y han sufrido persecuciones recurrentes. Los pogromos más recientes se produjeron en 2006 en Tonga e Islas Salomón de donde los chinos debieron ser evacuados. La causa de estas persecuciones siempre es la misma: El gran éxito económico de las comunidades chinas en el Exterior.
Centrémonos hoy en la situación de Malasia (el Estado malayo). En lo que hoy son los Estados Malayo, Indonesio y Singapur, los imperios coloniales británico y holandés atrajeron alrededor de 1850 a cientos de miles de culíes. Ciudades como Singapur, Malaca y Kuala Lumpur fueron creadas por ellos. Con la formación de los distintos estados nacionales la situación de los chinos varió en función del lado de la frontera en el que quedará su comunidad, pero partiendo de la hostilidad común de las comunidades malayas residentes.
Malasia es un país multiétnico donde un 50% de la población es de origen malayo; un 24% chino; un 11% son indígenas dayak y de otras etnias; un 7% son hindúes y el 8% restante está compuesto por otros grupos minoritarios. La riqueza nacional está concentrada de una manera absoluta en la minoría china. Esto ha provocado estallidos de violencia interétnica como los disturbios de 1968 en Kuala Lumpur. Para evitar que la situación se repitiera el gobierno lanzó en 1970 , la “Nueva Política Económica” que tenía como objetivo que el 30% de la riqueza empresarial de Malasia pasara a manos de malayos indígenas o bumiputra (príncipes de la tierra) en menos de veinte años. Se establecía una política de cuotas étnicas que pretende proteger a la mayoría malaya del poder que su riqueza le otorga a la minoría china.
Según estadísticas más al uso, aunque no excesivamente fiables, hay más de 40 millones de chinos de ultramar que en su mayoría viven en el sudeste de Asia, donde constituyen la mayoría de la población de Singapur y las poblaciones minoritarias significativas en Indonesia, Malasia, Tailandia, Filipinas y Vietnam.
La situación de los chinos de ultramar en los países de acogida siempre ha sido problemática y han sufrido persecuciones recurrentes. Los pogromos más recientes se produjeron en 2006 en Tonga e Islas Salomón de donde los chinos debieron ser evacuados. La causa de estas persecuciones siempre es la misma: El gran éxito económico de las comunidades chinas en el Exterior.
Centrémonos hoy en la situación de Malasia (el Estado malayo). En lo que hoy son los Estados Malayo, Indonesio y Singapur, los imperios coloniales británico y holandés atrajeron alrededor de 1850 a cientos de miles de culíes. Ciudades como Singapur, Malaca y Kuala Lumpur fueron creadas por ellos. Con la formación de los distintos estados nacionales la situación de los chinos varió en función del lado de la frontera en el que quedará su comunidad, pero partiendo de la hostilidad común de las comunidades malayas residentes.
Malasia es un país multiétnico donde un 50% de la población es de origen malayo; un 24% chino; un 11% son indígenas dayak y de otras etnias; un 7% son hindúes y el 8% restante está compuesto por otros grupos minoritarios. La riqueza nacional está concentrada de una manera absoluta en la minoría china. Esto ha provocado estallidos de violencia interétnica como los disturbios de 1968 en Kuala Lumpur. Para evitar que la situación se repitiera el gobierno lanzó en 1970 , la “Nueva Política Económica” que tenía como objetivo que el 30% de la riqueza empresarial de Malasia pasara a manos de malayos indígenas o bumiputra (príncipes de la tierra) en menos de veinte años. Se establecía una política de cuotas étnicas que pretende proteger a la mayoría malaya del poder que su riqueza le otorga a la minoría china.
Bumiputra es una palabra que significa “príncipe de la tierra” en malayo y que hoy en día se usa en Malasia para designar a los malayos étnicos que residen en dicho país.
Las empresas malayas que facilitaran la operación se verían beneficiadas a la hora de firmar contratos estatales; las empresas públicas se vieron obligadas a vender el 30% de sus acciones a accionistas bumiputra, muchos de los cuales compraban a través de fondos fiduciarios controlados por instituciones gubernamentales además los bumiputra podían acceder fácilmente a préstamos con bajos intereses; y se envió a miles de malayos al extranjero con becas del Gobierno.
Aquí tenéis un ejemplo de una promoción dirigida exclusivamente a los bumiputras
Al mismo tiempo, el Partido de la Alianza (partido oficialista que conduce Malasia desde su independencia) apostó por integrar a la oposición en el gobierno y la coalición ampliada fue rebautizada como Barisan Nasional (Frente Nacional), que sigue gobernando hoy en día. En 1990, cuando se cumplió el plazo establecido, la riqueza empresarial de los bumiputra había aumentado hasta el 19%, 11 puntos por debajo del objetivo marcado. No obstante, la pobreza se había reducido del 49 al 15% y había surgido una nueva clase media malaya. Esta política se completa con una política de cuotas que beneficia a los malayos o “bumiputra” en una estudiada política de equilibrio racial que incluyó, incluso, la separación de Singapur para reducir el predominio chino.
Aquí tenéis una viñeta que retrata las tensiones desatadas por la política de cuotas étnicas en Malasia
Ello ha provocado tensiones entre las diversas comunidades, pasando ahora la lucha por unas leyes que protejan sus derechos a la comunidad hindú (mayormente tamil) de Malasia.
Manifestación en Kuala Lumpur, noviembre de 2007
En el tema dedicado a la historia de Malasia encontraréis la información necesaria para comprender la dificil configuración de una Nación Malaya. Para poder ver qué, como y de que manera es la polifacética y apasionante Malasia de hoy no hay mejor referencia que La conexión malaya y sus Tigres...
R3 - 三重
Raúl,
ResponderEliminarLa mayor parte de los chinos con los que he hablado comentan que se sienten discriminados.La mayor parte de ellos son profesionales de nivel académico superior.En cambio, chinos taxistas me han comentado que no se sienten tan discriminados e incluso alguno me comentó(sólo uno) que si llegan a mandar los chinos en el gobierno cualquier diversidad que existiese en el país habría desparecido.Una opinión personal pero que me llamó la atención.
Sandokán